Hace no demasiado tiempo me sucedió algo que me sorprendió mucho, y porqué no decirlo, me sentó algo mal. Y es que resulta que se me tachó, por ser ingeniero, de ser una persona que con su trabajo no hacía ningún bien por la gente. Para esas personas que piensan que la tecnología es innecesaria, o que incluso solo trae el mal (¬¬), describo el caso de Sloan Churman.
Sloan Churman, que a excepción de sus amigos y familiares, no era conocida por nadie, ha adquirido un poco de fama en el mundo de Internet. La protagonista de la historia es una chica de 29 años que desde que nació ha padecido de sordera, necesitando durante toda su vida el uso de audífonos para poder escuchar. En el vídeo que se muestra un poco más abajo, se puede ver la reacción de Sloan cuando le activan un implante coclear. No voy a describirlo, es mejor que lo veáis.
¿Creéis que a la chica le ha sido indiferente que ese pequeño trozo de tecnología le ayude a oír con normalidad?
Esto para la gente que piensa que los ingenieros solo perjudican a la sociedad
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